Opalescence, la primavera de Clarins: Parte 2, ojos y labios

¡Hola, potingueras!

Si ayer veíamos la primera parte de la colección Opalescence de Clarins dedicada al rostro en general, y presentábamos 3 productos, hoy vamos a presentar otros 3, pero de ojos y labios.

Hacerlo de esta forma me parece más cómodo para vosotras y para mi, porque hay tanta información que es muy fácil perderse en ella. Espero que os esté resultando interesante y ameno.

Comenzamos el día de hoy con un cuarteto de sombras de Edición Limitada, la Ombre Minerale 4 Couleurs 12 Vibrant Light, una armonía de sombras delicada y romántica que combina, según la marca, un iluminador blanco nacarado, tonalidades opalinas rosa y gris, y el eyeliner ciruela vibrante.

En mi opinión, esta definición no es del todo exacta.

Para empezar, no hay una sombra que sea especcíficamente un iluminador o un eyeliner, puesto que todas son susceptibles de usarse en seco o en mojado y adquirir así más pigmentación y fijación, convirtiéndose en sombra o delineado, según las utilicemos.

Sí hay un blanco nacarado del que, en mi opinión, Clarins comienza a abusar un poquito en sus cuartetos de sombras. Me gusta, pero se repite bastante en sus armonías de color para párpados y creo que deberían plantearse otros colores de sombra y otros acabados diferentes. En la variedad está el gusto, ...y más de una compra. 
No son cuartetos económicos, precisamente, y esas cosas hay que mirarlas.
A su favor, debo decir que es muy luminosa y que se agarra muy bien a la piel.

El rosa es un rosa muy claro, de acabado ligerísimamente satinado. No es mate por poco, vaya. Lo justo para conseguir un acabado natural y despierto. Me parece una sombra ideal para igualar el párpado y hacer un look muy natural.

La sombra violeta me recuerda mucho a una que ya sacaron hace tiempo en la colección de sombras minerales individuales, la Vibrant Violet, pero la del cuarteto es más oscura, la base es amarronada, y el reflejo satinado morado es más relajado y elegante.

Y la sombra gris, ...para mi no es gris, sino verde oscuro grisáceo. Un verde militar muy saturado y con mucho gris, pero no es gris. Y me parece preciosísima y es la que más estoy utilizando en looks de tipo ahumado.

Es super elegante, ponible, combina bien con todo, se trabaja fenomenal, ...Que me encanta, vaya.

Como ya es costumbre, la cajita aparece con espejito interior, 2 pincelitos de espuma, y un cartoncillo con dos propuestas de look, uno más natural y otro más sofisticado.

El precio de este cuarteto es de 42€.

En cuanto a sombras individuales, han sacado dos nuevos tonos de Ombre Minerale, una entre rosa y dorado (04 Golden Rose), y otra con un color indefinido y muy especial, que es la que tengo yo, 17 Smoky Plum.

Cuando vi el color, sinceramente pensé que dónde le habrían visto el "plum" a este color, pero tras darle alguna vuelta, se lo encontré.

Ya os aviso de que en las fotos no se aprecian los matices ni de lejos, así que tendréis que ir a verla y toquetearla en el stand (os advierto que hay peligro de que os acompañe de vuelta a casa, avisadas estáis)

De entrada, se ve un color entre gris plomo, marrón oscuro, berenjena, chocolate, matices rosados,...todo depende de cómo le dé la luz. Y ahí ya me empezó a enganchar.

Después, la toqué, y ese tacto casi cremoso, esa pigmentación tan estupenda al segundo, me sedujeron.
Cuando ya la probé sobre el párpado y vi lo bien que se trabajaba, se difuminaba, se mezclaba, y permanecía en mi piel, me conquistó del todo y pasó a ser mi segunda sombra mineral individual favorita de Clarins (la primera es la 08 Taupe)

Es estupenda para cualquier tipo de look, y depende con qué la acompañes, destacan unos matices u otros.

Creo que ya os lo he comentado en alguna ocasión, pero, por si acaso, os lo digo aquí otra vez. Una de las cosas que más me gustan de las sombras de Clarins es que se adaptan a la piel de cada una. No tienen una pigmentación totalmente opaca, y, cuando esto sucede, por regla general, solemos decir que es que no pigmentan bien. Sí pigmenta, y muy bien, sólo que las sombras de esta marca en concreto buscan quedar bien sobre cualquier piel, sea cual sea su tono, y, por eso, son algo traslúcidas en ocasiones.
Ahora, si las queremos más saturadas, con trabajarlas en mojado, o poner una base debajo, solucionado.

No pigmentar bien, para mi, es que no deja un color uniforme, que se hace polvorienta, o que no agarra a la piel ni se nota sobre ella por mucho que la trabajes. No es el caso con estas de Clarins.

También me gustaría apuntar que, mientras que al principio me parecía que las sombras individuales pigmentaban mucho mejor que las de los cuartetos, la calidad de las de los cuartetos ha mejorado mucho en los últimos 2 años y, ahora, muchas de sus sombras son idénticas en cuanto a funcionamiento ya estén en formato individual o cuarteto.

El precio de estas sombras individuales es de 18€ y contiene 2 gramos. 

Con respecto a los labios, aparte de 2 Gloss Prodige, uno transparente y otro en tono coral que tengo ganas de probar, han aparecido 3 nuevos tonos en la gama de Labiales Joli Rouge Brillant.

Esta gama de barras de labios se caracteriza por una textura deslizante y una sensación ultra hidratante en los labios. El acabado es brillante, jugoso, y los colores no son saturados, sino que se quedan como si hubiéramos usado un gloss pigmentadito. 

La intensidad de color es modulable, pero nunca van a quedar totalmente cubrientes, como sucede con otras gamas de barras de labios de Clarins, como la Rouge Prodige, por ejemplo. Es más, ya te lo advierten en la caja con la palabra "Transparence".
Mucho menos, quedarán opacos.

Yo tengo el 21 Pink Orchid que, francamente, a mi me parece más un color melocotón, que un rosa. Para mi que se les fue el tiro poniendo el nombre, aunque el color es precioso y favorecedor, muy natural, y muy ponible para cualquier día.

Además, como ya os he comentado en más de una ocasión, las barras de labios de Clarins son tratamiento y color en uno, así que no sólo maquillamos nuestros labios sino que los hidratamos, y nutrimos gracias al aceite de frambuesa de su fórmula, los protegemos y rejuvenecemos con su uso continuado, logrando una piel de labio más hidratada, elástica, y fuerte.

Su precio ronda los 22,75€, y, como siempre os he dicho, es una muy buena inversión, porque los labiales de Clarins no defraudan.

Como véis, es una colección con muchos matices, con muchas posibilidades, con productos ponibles, adaptables y versátiles, en una palabra. Y es, sobre todo, una colección que aporta luz al rostro, que ya va apeteciendo.

¿Os convence Opalescence, potingueras?