Cuando os publiqué el post sobre Paletas de Invierno, os comenté que tenía algunas desde hacía ya bastante tiempo. Unas las retiré, y otras quería darles una vuelta a ver si podía continuar su uso un poco más, o también despedirme de ellas definitivamente.
Al final, de todo el conjunto, quedaron estas dos que véis hoy, Supernova y Enchanted Forest, ambas de Sleek, y ambas reseñadas en su día en el blog (enlaces en los nombres)
Como véis, tienen tonos fríos en su mayoría, y bastante intensidad para tener el tiempo que tienen, y ser la formulación anterior a las cosas tan impactantes que estamos viendo de 3 años a esta parte en muchas marcas, que han incrementado la calidad de forma exponencial.
Aún así, teniendo todo esto en cuenta, debo decir que me sorprendí al hacer los swatches tanto tiempo después. Me pareció que muchas de las sombras eran bastante agradables al tacto, y la pigmentación y transferencia eran bastante buenas. Están hechos dedo-brazo, sin prebases, en seco, sin trampa ni cartón.
¿Será todo tan bueno como parece?
Pues creo que lo mejor es ir viendo los looks que os he preparado con ambas, y las impresiones que me iba llevando a lo largo de la experiencia para saber si se quedan, se van, y por qué tomo esa decisión final.
Tras aplicar la prebase para párpados (la Hipoalergénica de Bell me va fenomenal y es baratita, y es la que utilicé), tomé la sombra verde marino mate Prince Charming de la paleta Enchanted Forest y marqué la V externa y la línea inferior de pestañas.
Para completar la banana, quise probar con el azul celeste Absolute Zero de la paleta Supernova, aunque fuera satinada, que también coloqué en el tramo más cercano al lagrimal en la línea inferior de pestañas. De esta misma paleta, añadí un toque de la duocroma rosada-dorada Meteor en el lagrimal.
Ya centrada con la paleta Enchanted Forest, difuminé el corte de las sombras y aclaré bajo la ceja con la vainilla mate Glass Slipper. En el párpado móvil encontramos la verde grisácea metalizada Daphne en la mitad exterior, y la gris acero metalizada Happily Ever After en la mitad interior.
Debo decir que me ha sorprendido la suavidad y pigmentación de las sombras. Están algo blanditas, pero no se deshacen.
En la waterline inferior quise complementar ese tono verde marino con el lápiz Glamurous Eye Pencil 409 de Kiko Milano.
Las mejillas van muy suaves, y para los labios elegí el Winter KIss Liquid Lipstick 01 Romantic Kiss de Bell, de un color malva empolvado mate muy bonito, y extremadamente cómodo.
El nombre es rarito y el look tampoco es que sea un clásico, pero me gusta cómo ha quedado.
En este caso, sólo he utilizado la paleta Enchanted Forest de Sleek.
Tras aplicar la Soft Eyeshadow Base Hipoalergénica de Bell, coloqué la sombra marrón chocolate mate Lady Tremaine en el ángulo de la V externa y primer tramo de la línea inferior de pestañas. Esta zona la completé con la sombra morada de base negra Grand Duke.
En la banana, difuminé con la sombra ciruela mate Anastasia, y cerré ese tramo con ayuda del bronceador Hoola de Benefit, que también es el que utilicé después para los pómulos. Para rebajar el corte y aclarar bajo la ceja tomé la sombra hueso mate Glass Slipper.
En el párpado móvil quise jugar con el Glitter Primer de Nyx para ganar intensidad en las sombras a aplicar, ya que, sobre todo la lilácea, mostraban bastante transparencia. En el tercio exterior apliqué la marrón dorada Drizella, en el centro la dorada tostada Pumpkin, y en el tramo interior y lagrimal, la lilácea Perla.
Para la waterline inferior escogí el lápiz de Gosh 018 Temptation, de un tono morado muy oscuro, y en la bajante de la ceja y el lagrimal di un toque del iluminador que también aplicaría después en la zona alta del pómulo, el de reflejo entre lila y azul de la paleta Prismatic de W/.
Finalmente, quise unos labios muy oscuros y opté por el Super Stay Matte Ink 110 Originator. De cerca, el overlip con este labial en concreto no es buena idea, como podéis comprobar.
Para este look he utilizado la paleta Supernova de Sleek en exclusiva, y ya os adelanto que no tiene ni una sola sombra mate, y he jugado con eso.
Una vez más, apliqué la Soft Eyeshadow Base Hipoalergénica de Bell en todo el párpado, y tomé la sombra morada casi negra Cosmos para marcar la V externa muy a ras de pliegue del párpado móvil. Después, con la sombra malva satinada Dark Matter, difuminé la banana y marqué la línea inferior de pestañas.
El párpado móvil lo quise enterito para la sombra duocroma Nebula, con acabado metalizado-perlado, y un reflejo azulado sobre el lila de base. Esta sombra la apliqué con el pincel húmedo, porque si no es bastante transparente (ya lo era en su día) Para el lagrimal elegí la otra sombra lila, pero más rosada, Gamma Ray.
Finalmente, en la waterline inferior quise un toque lila pero pastel, y opté por el lápiz Faux Whites 08 White Smoke. También di un toque de la sombra duocroma dorado-rosa Meteor en la bajante de la ceja y como iluminador en lo alto del pómulo.
En los labios quise algo alegre y vivo, y me atreví con el H&M Cream Lip Colour Fancy Freesia, de un rosa muy vivo y acabado muy cremoso.
Último look por el día de hoy. También utilicé sólo sombras de la paleta Supernova de Sleek.
Tras aplicar la prebase de sombras, tomé la sombra azul oscura metálica Zenith y la apliqué en la V externa muy a ras de pliegue del párpado móvil, y a ras de pestañas inferiores. Difuminé la banana con el bronceador Hoola de Benefit.
En el párpado móvil apliqué la sombra verde oliváceo metalizada Aurora en casi toda la almendra, y reservé el lagrimal para la dorada Umbra.
En la línea inferior de pestañas, al lado de la dorada, di un toque de la verde. En la waterline inferior quise un amarillo pastel y utilicé el Faux Whites 01Vanilla de Nyx.
Como iluminador para pómulo y bajante de la ceja mezclé las sombras Corona y Milky Way, que dejan más satinado que color.
Para los labios recuperé el Lippie Stix Hollywood Blv de Colourpop, en un bonito tono chocolate mate.
Conclusiones finales:
Me ha encantado recuperar estas dos paletas. Es como estrenar de nuevo algo que te gustaba, volverlo a conocer, volverse a ilusionar. Sin embargo, es obvio que el tiempo ha pasado, y las sombras no están como el primer día. Siguen pigmentando bien, y no he sentido irritación ni sequedad, pero sí debo decir que Supernova tiene mejor prestancia que Enchanted Forest en el sentido de notarlas algo arenosillas ya.
De momento, se quedan conmigo, pero en la siguiente purga se irán.
Reconozco que a mi me gusta mucho el maquillaje, y que las paletas de sombras de ojos son mi debilidad, pero hay que ser realistas, y cuando un producto ya no está bien, espreciso retirarlo sin pena. Para que no dé tanta lástima despedirse de él, ¿por qué no probamos a utilizar más las cosas en vez de llorarlas cuando ya no se pueden usar? El guardar para una ocasión especial no se lleva ni es rentable.
¿Qué os ha parecido el experimento?¿Os animáis a hacer algo parecido con paletas que estén en la cuerda floja?¿Que look os ha gustado más, potingueras?