Miss Tés, Vol. 6

¡Hola, potingueras!

Sí, dos semanas seguidas con esta sección, pero ya sabéis que no tengo una frecuencia establecida, las voy sacando según tengo material para compartir, me acuerdo, etc.

Voy vamos a darle al té, y vamos a ver unas cuantas propuestas de Teterum que, por un motivo u otro, me han sorprendido en estos últimos meses; dos de ellos por una razón muy concreta: aún llevado piña, me han gustado, y eso que a mi la piña en el té no me va nada de nada. La única piña que me gusta es la fruta natural que te comes a rodajitas o trocitos como postre, merienda, tentempíe, etc. Pero la piña deshidratada y aromatizada que suele incluirse en otro tipo de alimentos y bebidas me suele dar bastante repelús.

En principio, todos los tés deberíais poder encontrarlos en la página de la Tienda de Té o Teashop de Teterum. Si alguna vez no los véis allí, es porque se les han agotado en ese momento y no están en stock. La web los oculta de modo automático.
En cualquier caso, ante la más mínima duda, consultadles, porque son gente super amable y siempre dispuesta a echaros una mano y atenderos para ofreceros el mejor servicio.

Os los dejo enlazados a su página, de todas formas.

Pick Me Up:
Té rojo, té oolong sechung, espirulina, cáñamo, piña, y aciano.

Este té me llegó en el pack de septiembre y me parece de lo más exótico que he probado. De hecho, me costó varias tomas decidir si me gustaba o no, porque, por un lado, sabía que llevaba piña, y algo de sabor aporta, pero, por otro, enseguida ese matiz quedaba envuelto por el resto y el resultado era realmente curioso y difícil de describir. Espero hacerme entender en este punto.

Combina dos tipos de tés con sabores muy dispares entre sí que, sin embargo, combinan a la perfección. 

Además, al contrastar el toque ligeramente ácido de la piña, con el salado del alga espirulina (muy sutil, ni sabe ni huele a mar/pez), y el matiz terroso del té rojo con el casi lechoso del cáñamo, se consigue un resultado afrutado, con un puntito incluso dulce sin ser empalagoso, muy exótico y en el que es muy difícil distinguir notas separadas.

La piña se nota más si hueles el té que si lo saboreas, curiosamente, al menos en mi paladar, lo cual agradezco sobremanera, porque ya os he comentado que la piña y yo, en los tés, no nos llevamos bien; pero en toda regla, hay una excepción, y quizá este té sea ese punto de encuentro.
También hay que tener en cuenta que yo los trocitos de piña que encuentro se los voy quitando para que pierda algo del sabor a esta fruta, que, aunque quede algo, siempre es menos.

Realmente, un té muy original.

Murmurando en Frío:
Té negro, cáscara de naranja, bayas de goji, zanahoria, y saflor.

Este té apareció en el pack de julio, y me parece que tiene un sabor muy especial también.

Es un té negro y, como tal, tiene un sabor fuerte y consistente, amaderado sin excesos, y suavizado ligeramente por la dulzura de la zanahoria y con un toque cítrico y juguetón por parte de la naranja.

Dependiendo de la cantidad de "frutitas" que caigan en tu infusor, te resultará más o menos frutal o amaderado (más té, más madera, menos té y más fruta, más frutal); y, si tienes la suerte de que las bayas de goji hagan acto de presencia, el sabor es realmente especial y exótico, con ese punto acidulce de las bayas que, al final, si os apetece, hasta las podéis comer para que se mezclen más los sabores del té y las bayas.

Me gusta, y creo que es un té con suficiente cuerpo y sabor como para aguantar su versión en té frío.

En El Corazón Del Bosque:
Té Verde, Té Sencha, triángulos de naranja, arándano, y piña.

Este té está apadrinado por un hurón al que le encanta el té. Si queréis conocer su historia, entrad en la ficha.

Es un té tan tonificante que le perdono que lleve piña.Y se lo perdono porque el sabor de la piña no se aprecia, afortunadamente para mi. Y sí, también le quito los trocitos de piña.

Es un té ligero, tonificante, alegre, donde se aprecia el saborcito de la naranja y los matices rojos del arándano, dando un resultado cítrico no ácido y frutal sin excesos, donde se puede saborear el té verde base sin el puntito amargo que lo caracteriza.

Me parece perfecto para las mañanas o para esos momentos en que necesitas tomarte algo que te ponga de buen humor y te haga disfutar un ratito con un sabor tan sencillo de apreciar como reconocible.

Yo lo tomo en caliente, pero en frío tampoco está nada mal.

Inglés I Am:
Té negro Earl Grey y  aciano.

Llegó en el pack de octubre en una bolsita de muestra, y, por su descripción, pensé que pasaría sin pena ni gloria, pero me equivocaba.

El té negro me gusta, y el Earl Grey es de mis favoritos, pero nunca había sacado el gusto al aciano, así que pensé que iba a ser un Earl Grey sin matices que no fueran suyos notables. Craso error.

Nada más abrir el sobre, me llegó un aliento fresco, mentolado, intenso. ¿Será esto el aciano, o llevará menta? No lo sé, pero vamos a probarlo.

Ya había comenzado la seducción.

El primer sorbo fue revelador, impactante, cautivador. Una mezcla con cuerpo, con notas de tierra mojada y barrica de maderas nobles, era lo primero que invadió mi boca y mis sentidos.Me había trasladado a unas antiguas bodegas y estaba ante un “gran reserva” en versión té. Las notas mentoladas del aciano –supongo que serán del aciano, repito-, flotaban sobre los últimos vestigios de los matices amaderados, cuando éstos comenzaban a disminuir en intensidad, y, finalmente, las notas afrutadas típicas del Earl Grey, aparecían tímidamente al final, como un toque alegre que nos recordaba la base que sostenía todo el conjunto.

Y esas son las mismas notas que, según se iba enfriando el té, llegaban a la nariz, antes que ninguna, transformando la experiencia en un proceso cíclico, donde todo se mezclaba con orden y concierto, con arte, y con mucho gusto. Digno de un Gourmet.

Es un té para amantes de las experiencias sensoriales, y, por qué no, para aquellas que disfruten de un buen perfume, porque la construcción y las sensaciones se revelan de igual modo en este té y en una fragancia bien estructurada.

Obviamente, tuve que pedirme un sobrecito de 50 gramos en cuanto tuve ocasión, porque es espectacular.


¡Espero que os hayan gustado las propuestas, potingueras!