Soy muy consciente de que el tema de sombras de ojos ahora mismo está por remontar, aunque yo os las siga mostrando. Esto va por modas y rachas. Lo mismo en 2 meses empezamos a ver paletas de sombras como si no hubiera un mañana.
Sin embargo, sombras de ojos tenemos, y si queremos que nos duren, que se vean lo mejor posible, y que no nos traicionen haciendo pliegues o desapareciendo, o parcheando, hay que utilizar una prebase de sombras o eyeprimer. Y como dice la gran Nikkie Tutorials: "No prime is a crime."
Por eso, y porque siempre he defendido el uso de este producto, y dándose la coyuntura de que hace poco se me terminó mi prebase habitual, la Milani Eyeshadow Primer 01 Nude Chair, he decidido recopilar las que tengo por casa, y un par más que me compré por curiosidad, y marcarme un post old school en elque os cuento el funcionamiento de todas ellas.
Ya os he revisado algunas con anterioridad: el Magic Fix de Corazona, el Eye Canvas de Technic, y otras opciones para glitter de Technic y Hean, y para sombras de Wynie. Hay más, por supuesto, pero esas son las más recientes. De hecho, hoy volvemos a la Soft Eyeshadow Base de Bell Hypoallergenic (8g / 4,50€) que ya utilicé en su día y que sigo diciendo que es fantástica.
Aquí viene la trampa, la primera prebase que voy a incluir en las reviews de hoy es esta.
Es ligerita, se integra muy bien, y aunque tiene algo de color, no corrige ni cubre venitas u oscuridades. Unifica ligeramente (muy ligeramente), y punto.
Tiene aplicador de esponjilla, aunque a mí me gusta darme un toque en el centro y luego extenderlo y difuminarlo con el dedito. El calor corporal es lo que mejor activa este tipo de productos.
Como con cualquier prebase, hay que dejar que se asiente unos segundos (30 segundos, 1 minuto), y luego ya podemos aplicar sombra.
No crea parches ni manchurrones, intensifica el color y los brillos (aunque no tanto como una prebase específica para ello), permite difuminar y mezclar sombras sobre el párpado, la duración es más que buena (a mí me aguanta jornadas muy largas), en condiciones de calor y humedad se comporta muy bien, no crea pliegues, no reseca, no se cuartea, las sombras no se convierten todas en una y desaparecen sospechosamente,...La he llegado a utilizar para maquillar a nivel profesional y de verdad que tiene un rendimiento alucinante. Mientras siga existiendo y no la reformulen a peor, seguiré recurriendo a ella.
Una vez hecha la trampilla, tengamos en cuenta una cosa: mi piel ha ido cambiando y se ha vuelto un poco más exigente con la edad (50 años tienen la culpa) Ahora me preocupan los pliegues, que los brillos se queden más en su sitio, y que las sombras duren sin parchear o desaparecer, porque mi ojo está más encapotado y lo noto más. También, por ese motivo, por un lado la piel está más sequita, y la adherencia de las sombras sin prebase es menor, pero, por otro lado, en el pliegue hay más sudor o grasilla acumulada porque es la reacción natural de la piel en los pliegues. Un combo estupendo. La tormenta perfecta.
Por lo tanto, creo que os puede interesar este post tanto si la piel de vuestro párpado es seca como si es grasa, porque lo tiene todo.
Sigo con Bell y su Eye Glitter Primer (10g/ 4,99€)
Pertenece a la colección Love In The City pero sigue a la venta en varios puntos de distribución.
Su fórmula es cruelty free, contiene un 82% de ingredientes de origen natural, y cera de abejas para evitar que la delicada piel de los párpados se reseque.
Esto último nos puede dar a pensar que va a generar grasita o sensación resbaladiza, o pliegues. Nada de eso si la utilizamos bien: cantidad mínima, extender con el dedo, y dejar que pase un minuto o dos antes de aplicar las correspondientes sombras.
Su función es la de crear más adherencia en el párpado para las sombras evitando que se vayan cayendo, sobre todo si contienen brillos. Puede utilizarse para sombras mate o para sombras brillantes.
Tiene un tono beige muy clarito que unifica ligeramente el párpado, y pigmentos brillantes que le dan un aspecto ligeramente satinado. Esto último se traduce en que incrementa los brillos de las sombras que los contienen, pero no modifica sustancialmente las sombras mate, que se siguen viendo mate.
Me gusta porque es muy versátil, cumple su función, e incrementa el brillo cuando la sombra lo contiene. Sin embargo, no me parece tan superadherente como versiones anteriores como la Starlight Eye Primer de Bell, que creo que ya no está disponible, y es una pena.
Es una buena prebase, pero para pigmentos me gusta algo más específico y más adherente. Con esta prebase en días de mucha humedad ambiente he tenido mis más y mis menos.
J.Cat All About That Base Nude Shadow Primer (10g /7,30€)
Esta marca la encontráis en Druni y hay tres opciones de prebase: glitter (que tiene buena pinta, pero tras la experiencia con esta no sé si me animaré a probarla), la shimmer (dicen que tiene brillitos), y la nude, que es la que os muestro hoy y que tiene un tono beige neutro que unifica ligeramente la piel del párpado.
Necesitas muy poca cantidad, y es mejor prepararla con los dedos, porque con el calor se expande y te das cuenta de que, a poco que sudes, siempre parece demasiado. Repito, muy poca cantidad, que si no, la lias.
Al aplicarla en el párpado, se agarra bastante, y a mí me cuesta un poco extenderla cuando hace mucho calor. Cuando no, sin problema. Necesita tiempo de reposo. Si no le das entre 30 segundo y 1 minuto sobre la piel antes de aplicar la sombra, como mínimo, pliegue asegurado antes de terminar de maquillarte.
No intensifica el color ni el brillo, pero sí sujeta las sombras durante varias horas sin crear pliegues (si has seguido estas recomendaciones) El problema que le encuentro es que no sujeta nada los brillos de las sombras, y no me refiero a glitter, sino a un efecto satinado o un shimmer muy fino. Desaparece y sólo queda la base mate y el color. Y yo uso brillos día sí y día también, y no quiero estar pendiente de si se quedan o se van en el momento menos oportuno.
Seguiré probando con ella, a ver si con los usos consigo hacer que funcione como desearía que lo hiciera o cambia la fórmula lo suficiente como para que me guste. No es la primera vez que una prebase no me convence de entrada, paso de ella un tiempo, y cuando la recupero me fascina. Ya os contaré.
W7 True Grip Eyeshadow Primer (8ml/ 2,50)
Confieso que la compré sin ninguna expectativa y me está gustando bastante, en general.
La fórmula es vegana y cruelty free, aprobada por PETA.
Viene con un aplicador de esponjilla tipo gloss y la textura es muy ligerita. No llega a ser líquida, pero no es una crema como la anterior. No tiene apenas color ni unifica ni cubre venillas. Yo la extiendo con el dedo y se asienta en muy poquito tiempo. Sabes cuándo está lista porque notas el párpado pegajosito. En eso me recuerda a las prebases para glitter. Admito que esa sensación es algo incómoda, pero al aplicar la sombra se elimina (es como los labiales de dos fases en los que la primera fase es pegajosa y al poner el bálsamo ya no lo es)
No creo que intensifique el color de las sombras, pero los brillos los sujeta muy bien, evita la caída y el pliegue, y responde bien a largas jornadas, incluso con sombras muy económicas, calor, y humedad del Levante español en verano.
Es fácil de trabajar tanto la prebase como las sombras, no crea parches, y teniendo en cuenta su precio, yo me haría con una y probaría si fuera vosotras. Un descubrimiento. Muy bien W7.
Sheglam Ready Set Primer (8ml/ 2,99€)
Igual que la anterior en cuanto a formato, pero algo más cremosa, aunque sigue sin aportar un color notable al párpado, pero algo neutraliza. Tiene una textura ligera y es fácil de extender. Igual que en el caso anerior, aplico con el aplicador y extiendo con el dedo para integrar y asegurar que quede todo repartido uniformemente.
Como con todas las prebases, dejamos que se pose unos segundos, y cuando la notamos seca, o casi, aplicamos la sombra. Es preferible pasarse de tiempo que no llegar, porque si está demasiado húmeda, pliegue al canto. Esta, y todas. Yo normalmente, cuando me voy a maquillar, aplico la prebase de sombras, y mientras limpio la piel y la preparo, se asienta. También es que se tarda nada.
La fórmula contiene aceite de argán, de girasol, de jojoba, y vitamina E. Cuida la piel sin engrasarla, así que se puede utilizar tengas el tipo de piel que tengas, aunque creo que es especialmente apropiada para piel madura.
Con esta sí he notado que se intensifica el efecto de la sombra, sobre todo si es shimmer. Intensifica el color base y el efecto de la sombra. Asegura una buena duración de las sombras, con sus brillos incluidos, no crea parches ni pliegues, y se comporta muy bien en situaciones de calor y humedad.
Hace eones que no compro en Sheglam, me da una pereza tremenda, pero tienen productos realmente interesantes y amables con el bolsillo medio.
Vivaladiva Glow Eyeshadow Primer (12g/ 3,49€)
Esta esla última prebase para sombras que veremos en el día de hoy, y con ella tengo mis más y mis menos.
Se trata de una prebase muy cremosa de la que necesitas una cantidad ínfima para cubrir las necesidades de los dos párpados. Medio grano de arroz es suficiente, sin exagerar. Lo mejor es tomarlo en la yema de un dedo y calentarlo con la yema de su opuesto, veréis cómo se extiende en un momento.
Se aplica sobre el párpado y se difumina hasta integrarse del todo. Es fácil saber cuándo has terminado porque esta prebase tiene color y cubre venitas, pero si no la extiendes bien quedarán parches más claritos. Simplemente dedícale unos segundos de mimo, y listo.
Una vez aplicada y extendida, esperamos unos segundos a que se asiente bien (yo suelo dejar 1 munuto, más o menos) y podemos aplicar las sombras.
Esta prebase funciona muy bien con sombras mate y en estaciones medias o con frío.
He notado que opaca un poco los brillos, como si los matificara ligeramente. También he tenido momentos de alegría y de desastre con ella, porque resulta que cuando hace mucho calor y humedad no funciona bien, al menos en mis párpados (que son bastante neutros, ni grasos ni secos) Me crea parches y en apenas 4 horas ya no se sabe qué sombra es y dónde está porque son todas una y desparramadas, con pliegues, etc. Sin embargo, cuando la empecé a probar y no era verano aún, y en los días de verano que ha refrescado un poco, la he utilizado y me ha aguantado perfectamente toda la jornada sin que se moviera nada.
Creo que es una prebase que puede funcionar mejor en párpados más secos, y en climas medios. Pero para brillos, mejor usar otra.
¿Qué os parecen todas estas prebases?¿Conocíais alguna?¿Cuáles me recomendáis, potingueras?
1 comentario:
Ohh cuanto hacia que no pasaba por aquí. Un gran post, muchas gracias por hacerlo 🫰🏼
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