Soft Colors de Douglas: Una primavera dulce y viva.

¡Hola, potingueras!

La primavera ya está en pleno apogeo. Las flores inundan de color las calles y nos contagian de esa alegría. Nos apetece sacar ropa más colorida, y nuestro maquillaje se vuelve más fresco, femenino, y atrevido, combinando brillos en ojos y mejillas, y jugando con diferentes acabados en los labios.

Douglas Make-Up celebra esta estación lanzando la colección Soft Colors, de Edición Limitada, para esta primavera 2017. Rica en detalles barrocos en los dibujos de su packaging, con un puntito folk, y jugando con un tono rosa pastel de fondo, dulce, cremoso, y femenino, busca resaltar a través del contraste ojos, pestañas, y labios.

Por la parte que me toca, salvo la barra de labios, que tiene un envase ligeramente cromado, y me parece algo más "adulta", el resto me causa sentimientos encontrados, porque, sí, es muy mona, pero parece de juguete. Ya sé que muchas firmas juegan con esta estética, pero a mí no me suele llamar la atención.
Sin embargo, teniendo en cuenta que el contenido me ha encantado, me quedo con lo cuqui, y admitimos pulpo como animal de compañía.

Ningún producto tiene un nombre específico, porque la colección es la que es, y no se va a agrandar, así que no hay pérdida posible.

Comenzamos con la paleta de sombras Soft Colors Eye Shadow Palette Douglas Make-Up (12,95€)

Me parece una preciosidad, y me ha conquistado desde el primer día.

Combina sombras muy brillantes y rosadas con otras mate, oscuras y azuladas, para jugar con combinaciones según sea de día, de tarde, o de noche.

Por la parte de atrás encontramos la información sobre su composición, y una numeración de las sombras. También nos aclara que todas son sombras de 1,5 gramos, salvo la central, de 0,9 gramos.
Creo que este detalle es interesante porque parecen más pequeñitas de lo que son, y la verdad es que son cantidades bastante majas.

La paleta es de plástico duro, sin espejo, ligera, y que cierra muy bien con un fuerte click, cosa que nos gusta a todas, porque nos da seguridad.

Pese a que dos de sus sombras son muy perladitas, no hay ni una sola partícula viajera por dentro, incluso una vez utilizada. No son, en absoluto polvorientas ninguna de ellas.

Tienen un orden, pero yo voy a ir por acabados, partiendo desde estas sombras perladas, muy compactadas, con un destello ultra fino y muy bien prensado, que se adhiere al párpado de tal forma que no necesitas ni prebase para fijarlas. El primer día que las usé, no llevaba ningún fijador o base en crema, y me aguantaron más de 8 horas sin moverse, plegarse, o perder intensidad. Tampoco me dejaron destellitos por el rostro. Me encantan.

Son sombras con una pigmentación buena, pero acabado semitransparente, ya que su fuerte es el de aportar brillo; pero un brillo muy especial que parece agua. Es muy difícil describir el efecto y apreciarlo en fotos, pero, si las podéis probar al natural, os váis a sorprender.

La primera es de color rosa ligeramente cálido, como un oro rosado, pero sin matiz dorado.
La segunda tiene un sutil tono malva muy alegre, que no apaga la mirada en absoluto, y que me parece tremendamente favorecedor.

Tanto una como otra las podéis aplicar encima de otras sombras para dar efecto y quedan genial.

La sombra central es la más pequeñita. Tiene un color blanco neutro, muy buena pigmentación, y un acabado satinado notable. Como iluminador para el lagrimal queda muy bien.

Pasamos a las dos sombras mate de la paleta. No son de acabado mate seco, sino que se aprecia cierto acabado sedoso, pero, a efectos prácticos, se comportan como una sombra mate. Pigmentan muy bien, se difuminan bien, no son polvorientas, se adhieren bien, y no parchean.

 

La de la derecha de la paleta tiene cierto color turquesa oscuro, tipo "pavo real" o teal, y la de la izquierda es de un bonito color azul marino. Para crear bases, o ahumados, son ideales.

Seguimos con los ojos, y descubrimos la Soft Colors Double Ended Mascara Liner de Douglas Make-Up (7,95€), que nos ofrece dos productos en un mismo formato: máscara, y eyeliner.

El eyeliner tiene un color negro intenso, y un aplicador que parece de fieltro, aunque la punta es muy móvil, como si fuera pelito, aunque no lo es. Aún así, es fácil de manejar, y podemos trazar desde un delineado finísimo a uno grueso.

Sin embargo, le encuentro dos problemillas con el mismo origen, que comparte con la máscara: el producto es bastante líquido. Esto hace que, por un lado, como no lleves cuidado, te puedes hacer un buen manchurrón en el inicio del trazado del delineado; y, por otro, que, al cerrar el envase, por mucho cuidado que tengas, algo de producto se escurra y manche bote y manos, cosa que me ha sucedido cada vez que lo he utilizado, y es muy engorroso.

 

 

Además, al ser tan líquido, puede colarse por las líneas del párpado. Si éste es joven y terso, no hay problema, pero como empiecen a ser ya notables esas rayitas, por edad o por lo que sea, puedes hacerte una telaraña en un momento.
Se seca relativamente rápido, pero creo que debería ser algo más cremoso.

A la máscara le sucede un poco lo mismo, y por eso no cumple, al menos, conmigo, su misión de dar volumen a las pestañas.

 

El cepillito es pequeño y muy manejable, y tiene una forma cónica ideal para atrapar todas las pestañas. Sin embargo, al ser el producto tan fluido, a mi no me hace prácticamente nada.
Si tienes unas pestañas largas y espesas, genial, porque te las oscurece y te las peina, pero poco más.

Lo siento, pero éste es el único producto de la colección que no me convence.

Finalmente, llegamos a los labios con la barra de labios Soft Colors Lipstick Matte Red de Douglas Make-Up (9,95€), que me ha encantado.

Para comenzar, su envase tiene un tono rosa de acabado cromado casi pulido, muy elegante, y se abre y se cierra a rosca, cosa curiosa, y que nos da una sensación de seguridad insuperable. Me ha encantado este punto.

Pese a que dice ser "red", no es rojo, sino de color rosa chicle de fresa subido, muy bonito, femenino, y alegre. Tiñe el labio, y eso hace que, aunque cuando te lo apliques no sea mate, sino cremoso, según se va asentando y pasando las horas, se va matificando y aclarando algo el tono, y queda un bonito labio mate, pero sin aspecto o sensación de sequedad. Transfiere, sobre todo cuanto más cremoso está, pero no se va todo el labial detrás del vaso cuando bebes, es una transferencia aceptable.

 

Recién aplicado

Es muy confortable, de principio a fin, y aguanta incluso el comer y el beber, y hablar durante horas. Obviamente, la intensidad va bajando, pero no es un labial que desaparezca por la zona de la mucosa o a parches sino que se va degradando muy elegantemente, y creo que, como lo probéis, os váis a enamorar de él.

Mañana veremos un look en el que he incluido todos estos productos como protagonistas, así que espero que os animéis a verlos en acción.

Podéis encontrar la Colección Soft Colors de Douglas Make-Up en Perfumerías Douglas, punto exclusivo de venta de esta marca.

¿Qué os ha parecido la Colección Soft Colors de Douglas Make-Up?¿Qué producto os llama más la atención, potingueras?