Prensar pigmentos, una forma de ahorrar espacio.

¡Hola, potinguer@s!

Creo que todas hemos visto y leído más de una vez cómo prensar pigmentos.
Sin embargo, yo no había subido este post aún y, como Poison Ivy me lo pidió, muy gustosa se lo publico.

Lo que os voy a contar seguramente no os suponga mucha novedad, pero quizá veáis algún truqui que os guste.

Qué necesitamos:
- Un paño al que no le tengamos mucho aprecio para que nos haga de salvamanteles.
Tened en cuenta que suelen mancharse.

- Palillos o una espátula pequeña.
Se usan para mezclar y colocar el pigmento.
También suelen mancharse, por eso elijo los palillos.

- Alcohol o colonia baratita si queréis que, además de prensados, los pigmentos queden perfumados (uno de Miss Truquis ;) )

- Papel absorbente o papel de cocina algo grueso.
Se usa para absorber el exceso de alcohol al mismo tiempo que prensamos el pigmento.

- Una moneda o algo que tenga el diametro de la latita donde se va a prensar el pigmento.
Si es más pequeño, no pasa nada; sólo que tendréis que aseguraros de repasar bien todas las zonas.

- Pans o latitas donde prensar el pigmento.

- Pigmentos, evidentemente.

También necesitaremos paciencia, tener la precaución de no ponerse en una corriente de aire para evitar que los pigmentos salgan volando y recordar que parte del pigmento se perderá en el proceso (algo siempre se cae y algo siempre se queda en el palillo, el papel de cocina y las manos)

Otro tema a tener en cuenta es que, a veces, durante el proceso de prensado, algunos pigmentos cambian de color, aunque, al secarse, suelen recuperar el tono original.

No todos cambian de color, ni todos se recuperan; así que, haced una pequeña prueba antes de quedaros sin el pigmento que tanto os gusta echando un poquito de pigmento y de alcohol en un recipiente y esperando a que se evapore.

Este sistema no funciona para todas las marcas de pigmentos.

Yo lo he usado con éxito con pigmentos de Primarily Pigments (están en ebay), con los de Mac, con Carlo Di Roma, los minerales de Elf, Easy Paris, Yes Love, y Yesensy.


De momento, aguantan prensados; aunque hay que evitar darles golpes o apoyar fuertemente los pinceles sobre ellos porque se quedan como si fueran mousse (sobre todo, los "chiniles")

En el peor de los casos, recordad que, si una vez seco el pigmento, la sombra se desmonta, siempre podéis volver a usarlo como antes: como polvo suelto.

Proceso:
1.- Siempre trabajamos sobre el paño para evitar manchar la mesa.

2.- Echamos un poco de alcohol en la latita y depositamos pigmento poco a poco, mezclándolo hasta crear una pasta uniforme.

3.- Echamos un poco más de pigmento sobre esa pasta y empezamos a prensarla suavemente con el palillo para que se quede pegado.

4.- Cuando veamos que se queda mucho producto suelto, echamos un poco más de alcohol con mucho cuidado y volvemos a crear la pasta.
Repetimos la misma operación hasta que haya algo de "copete" sobre la latita. Esto hacedlo cuando ya tengáis algo de práctica y controléis la cantidad que necesitáis para rellenar bien la latita. Recuerda que, al prensar, esa pasta baja.

5.- Apoyamos con suavidad el papel de cocina sobre la nueva sombra y presionamos ligeramente para comprobar la cantidad de alcohol que sobra.
Si nos hemos pasado con el alcohol, habrá que esperar a que se evapore un poco antes de prensar la sombra; porque, si no, nos llevaremos toda la pasta en el papel de cocina.

6.- Una vez comprobamos que la pasta es óptima para prensarla (suelta poco alcohol y no se queda pegada en el papel), colocamos el papel sobre esta pasta y presionamos con cuidado, pero con seguridad, con la moneda o el utensilio que hayáis elegido para tal labor.
Yo lo hice en esta ocasión con el tapon de un bote de colonia.

7.- Una vez prensado el pigmento, limpiamos con cuidado los bordes de la latita y la dejamos secar.
Aunque suele estar más o menos en unas 4-6 horas, como hasta pasadas 24 horas no es recomendable usar esta nueva sombra para que se evapore del todo el alcohol, es mejor dejarla reposar todo ese tiempo.
En este caso, más vale pasarse que no llegar; más que nada, para no tener que repetir todo el proceso.

¡Y eso es todo!


Ya podéis colocar la nueva sombra en su paleta y usarla cuando os apetezca.

Yo me animé a prensar pigmentos y me junté con tantos que decidí quitar el plástico de mi paleta de 28 pans que compré en ebay (quitando antes con cuidado y la ayuda de un alfiler las sombras que tenía colocadas en ella)

Simplemente, con ayuda de un cuchillo plano, fui despegando por los bordes y me hice hueco para poder meter los dedos y tirar del plástico.

La silicona con la que estaba pegado la podéis retirar tirando de ella y, de lo que no se puede tirar, con acetona.

Y ahora tengo un monton de sombritas nuevas en una paleta en la que caben 40 sombras en vez de 28.


¡Espero que no se os haya hecho largo el episodio de Potibricomanía, potinguer@s!

NOTA: Yo no lo he probado, pero, según tengo entendido y me vuelven a confirmar (gracias, Papish), los pigmentos de Nyx no se pueden prensar con ese sistema.
Parece ser que Nyx vende un líquido de su marca que sirve para este fin (gracias, Kyllie)