BB Cream Deborah Milano, tremendamente natural.

¡Hola, potingueras!

Revisando entre los potis que tenía por comentaros, resulta que me había dejado en el tintero esta BB Cream de Deborah Milano y, aunque ya hay múltiples reviews por la blogosfera, también quería daro mi opinión.

La BB Cream de Deborah Milano se plantea, más que como una BB cream estilo oriental, como un perfeccionador de la piel, y promete 5 efectos: preparar, corregir, unificar, hidratar, y proteger la piel.
¿Cumple con ello? Ahora os lo cuento.

Por preparar la piel no sé muy bien a qué han querido referirse desde Deborah Milano. Para mi, preparar la piel es hidratarla y dejarla lista para maquillar, quizá aportar algo de luminosidad.
En este sentido, se solapa con el segundo punto: hidratar; por tanto, no sé si la prepara o no según a qué se refiera la marca. Para mi, sí y no.

Hidratar, hidrata lo justito, al menos mi piel, que se bebe lo que le eches en invierno -y eso que este año me está respetando mucho y no me puedo quejar-, así que, si despues aplicara un maquillaje encima, necesitaría que fuera más hidratante. ¿Y para qué quiero yo un maquillaje sobre una BB Cream? Pues ni idea chica, yo, normalmente, como mucho lo hago al revés.

Aplicaría una base hidratante debajo que me cubra un poquito más de lo que lo hace esta BB Cream, y luego aplicaría la BB Cream si quisiera modificar el acabado o el tono de la base.

Corregir, no corrige mucho que digamos, al menos en mi caso, porque la firma me envió el tono 02  para que lo probara (existen 4 tonos) y me queda algo oscuro, así que me lo tengo que difuminar bastante. Quizá en verano sí se me ajuste más, porque el tono es tostadito, pero no es dorado del todo, así que me puede encajar. La pena es que sólo tiene Spf 20, que está muy bien para el invierno, pero para verano a mi se me queda cortito (a mi, ojo, puede que a personas más morenitas que yo les vaya estupendamente)

Unifica el tono, eso sí. Deja una piel muy bonita y natural gracias a los pigmentos soft focus que contiene. Para mí hace el efecto de una hidratante con color de acabado casi mate (no es mate-cartón, sino mate natural) que se mantiene durante horas sin sacar brillos y sin resecar la piel. En ese sentido me gusta mucho.

 

Proteger la piel, ya hemos comentado que tiene Spf 20 y me parece una buena protección para invierno; así que, si encuentro mi tono, quizá la pruebe, pero para verano se me quedaría justita y tendría que combinarla con un protector solar de muy alta protección.

En resumen, yo diría que es una BB Cream de acabado natural, cobertura baja, aunque modulable, muy combinable con otras bases para lograr un acabado o tono más bonito, cómoda de llevar -aunque yo necesito un poquito más de hidratación-, y que cuida la piel gracias a su Spf 20 y a su composicion rica en Omega 3 y 6 y un complejo vitamínico.

Contiene 30 ml, cuesta 12,95€ y aparece precintada, algo que nos garantiza que se mantiene fresca y en perfectas condiciones hasta que nosotras le quitamos ese precinto y comenzamos a utilizarla.

¿Qué os parece esta BB Cream de Deborah Milano, potingueras?