Instant Bucolique, la propuesta de Givenchy para esta primavera.

¡Hola, potingueras!

Hoy quiero presentaros la colección de maquillaje que Givenchy ha diseñado para la primavera de 2012, Instant Bucolique. Se inspira en los primeros rayos de sol, los campos que se llenan de flores de colores suaves, y las amapolas que se mecen con una suave brisa.

El rosa, el verde y el rojo son los tonos que más abundan y se repiten junto al malva que tantas primaveras nos lleva acompañando, y el sempiterno marrón, ese color que nos recuerda la madera y está presente en cada colección y en cada estación.

La piel es clara, transparente, casi traslúcida; muy luminosa. Para conseguirla, además de la base Photo'Perfexion Light de la que ya os he hablado en más de una ocasión y que se ha convertido en mi base favorita por méritos propios, Givenchy ha creado una de las polveras más bonitas que he visto, Le Prisme Visage Bucolique nº1 Bucolic Blossoms, un polvo compacto que ya desde la firma nos advierten que es imprescindible.

Visto desde arriba, la idea que intenta transmitir es la de un campo en flor en primavera.

Esta pequeña joya que viene en una cajita cuadrada de doble piso es un polvo compacto que aporta un halo luminoso a la piel.

Cuando lo tomas recogiendo todos los colores que lo componen, se ve blanco; pero, una vez lo difuminas, sólo ves ese ligero brillo satinado (no purpurinoso) que nos recuerda, o al menos a mí sí me recuerda, a un ligero efecto húmedo en la piel que nos aporta una sensación de frescor y de lozanía.

El tacto es tremendamente suave y el acabado es absolutamente precioso.


Además, esta cajita contiene en el segundo piso una brocha de media luna que se puede y se debe usar, puesto que es muy suave y muy práctica.

Otro de los productos de esta colección a destacar por lo bonito que es y por el acabado que tiene sobre la piel es Le Prisme Blush Bucolique, un colorete cuya referencia es un campo de amapolas, símbolo de la vivacidad de esta temporada.


También la cajita tiene una parte que se abre en claqueta, donde encontramos el colorete y un espejo tras la tapa, y un segundo piso que se abre por deslizamiento, gracias a un pequeño tirador de plástico, que contiene una brocha de media luna de pelo muy suave que ayuda a sacar el máximo partido a este producto.


El colorete puede encontrarse en dos tonalidades: rosa (nº1 Bucolic Rose) o rojo (nº2 Bucolic Poppy)

Yo tengo el nº2, Bucolic Poppy y me parece uno de los coloretes más bonitos y favorecedores que he podido probar.

El tacto es muy suave y el tono del polvo mate en tono melocotón se mezcla perfectamente con las pequeñas motas rojas satinadas que lo salpican, obteniendo un color final rojizo suave muy favorecedor, como si nos hubiéramos dado un paseo por el campo y nos hubieran subido los colores.

La permanencia es muy buena sobre la piel, y el aspecto es inmejorable.

No podía faltar un cuarteto de sombras en esta colección. En este caso Le Prisme Yeux Quatour nº 79 Bucolic Blossoms es el estuche de sombras elegido para esta colección.

Es un cuarteto de sombras inspirado en una primavera que renace: marrón por la madera, rosa por las flores, verde por los brotes de hierba y malva por los primeros cielos azules de la primavera.

La cajita es igual en estructura que el polvo compacto y el colorete, sólo que en el piso de abajo contiene 3 pincelitos: uno de esponja redondeado para aplicar y difuminar sombras, uno de esponja en punta para aplicar toques de luz en el lagrimal o incluso difuminar el delineado, y un tercero de pelo cortado al biés algo ancho que puede servirnos para delimitar zonas y difuminar en diagonal o a ras de pestañas inferiores.

En cuanto a las sombras, son muy sedosas y pigmentan más en la yema de los dedos y sobre el párpado que en el dorso de la mano. Creo que esto puede ser porque el polvo es muy fino y se adhiere mejor a zonas que tienen más humedad y/o grasa.

Nicholas Sketch propone el look que véis en esta imagen de la derecha.

Para los labios y las uñas se ha elegido un rojo vivo, como los pétalos de las amapolas, para resaltarlos, en contraste con la dulzura de las sombras.

La barra de labios (Rouge Interdit nº54 Bucolic Poppy), el gloss (Gloss Interdit nº32 Bucolic Poppy) y la laca de uñas (Vernis Please nº177 Bucolic Poppy) son de edición limitada y tienen un color absolutamente fascinante.

El Gloss Interdit nº32 Bucolic Poppy tiene una textura densa, no pegajosa, y un pincelito corto de pelo que permite rellenar incluso los rincones más pequeños de los labios sin salirse por las comisuras, pero que, a mi parecer, es excesivamente rígido y cuesta hacerse con él al principio.

Tiene buena cobertura, casi parece un labial en barra, y un acabado brillante tipo vinilo muy sexy. Le acompañan un olor a frambuesa intenso y una duración bastante aceptable (es un gloss, no nos olvidemos de eso)
Además, deja el labio perfectamente hidratado y lo mantiene así durante horas.

La laca de uñas Vernis Please nº177 Bucolic Poppy también tiene ese rojo amapola que tanto nos gusta a las amantes del rojo y cubre perfectamente con una sola capa la uña.


Es de secado rápido, el tacto una vez se seca es muy suave y no sé cuánto durará, porque yo me retiro el esmalte a los 3 días; pero me lo desmaquillé intacto ( y no había usado ningún top coat para probar su resistencia)

Precios:
Le Prisme Visage Bucolique nº1 Bucolic Blossoms: 11 g/ 52€.
Le Prisme Blush Bucolic (nº1 Bucolic Rose o nº2 Bucolic Poppy): 7 g/ 45€.
Le Prisme Yeux Quatour nº 79 Bucolic Blossoms: 4x1 g/ 50,50€.
Rouge Interdit nº54 Bucolic Poppy: 29€.
Gloss Interdit nº32 Bucolic Poppy: 6 ml/ 26,50€
Vernis Please nº177 Bucolic Poppy: 5,5 ml/ 18€.

No sé a vosotras, pero a mi me ha encantado esta colección y ya tengo mis productos favoritos dentro de ella.
¿A vosotras cuále s el producto que más os ha gustado, potingueras?