Miss Yankee Candles, Vol. 1: Plumeria, Orange Splash, Citrus Tango, Oud Oasis, Quemadores y envases.

                                                                                                           ¡Hola, potingueras!

Hace ya tiempo que las Yankee Candles se instalaron en nuestras vidas como algo habitual. Cada vez hay más lugares físicos y online en nuestro país donde adquirirlas, y a buenos precios.

Yo siempre tengo varias Tarts de Yankee Candle en uso, porque no siempre me apetece el mismo olor. La apetencia cambia con la temperatura ambiente, la época del año, el estado de ánimo, o, incluso, la hora del día.

Cómo las uso, qué tipo de quemador es recomendable, y de qué formas lo limpio, os lo conté en este post, que creo que os resultará interesante.

Hace poco os hablaba de mi nuevo quemador Yankee Candle y de algunas reflexiones sobre esta herramienta. Si os apetece recordarlo, lo tenéis aquí.

En esta sección, que irá apareciendo de vez en cuando, os iré comentando impresiones sobre las Tarts o velas de Yankee Candle que vaya probando, y así intentar orientaros un poco a la hora de que hagáis una compra.

La sección Miss Yankee Candles se abre hoy, pero podéis encontrar otros post con más información bajo la etiqueta Yankee Candle.

Por ser el primer post de esta serie, os dejaré enlazadas todas las descripciones sobre Yankee Candles que he comentado en el blog en esta entrada, y en esta otra. 

Quizá entre edición y edición de este tipo de post transcurra bastante tiempo, porque no las uso todos los días, y, además, no me gusta tener 20 abiertas. Generalmente, tengo 4 o 5 como mucho, y, según se van gastando, voy reponiendo.

Para conservarlas, suelo meter los trocitos de las tartaletas en algún bote de plástico, un tupper, o, incluso, alguna cajita de las que traen las barajas o similar.
 

Tupper pequeño

Bote que contenía pétalos de flor de una edición de Lidl

Cajas de barajas de cartas

No los suelo envolver en plástico o papel de aluminio, aunque también se puede hacer. No se mezclan los olores aunque estén sin proteger, pero las miguitas que caen, sí. 

Truco: guardad juntas las que tengan el mismo estilo de olor (cítricos, florales, frescas, dulces,...), y, cuando se vacíe, echad las migas como si fuera un trozo de tartaleta. Quizá saquéis un olor curioso. Único, desde luego, será.

Plumeria:
Es una relajante mezcla de flor de plumeria (o frangipani), jazmín, tuberosa (o nardo), cítricos, y notas de sándalo.

El olor me parece super agradable. Es floral, intensa, pero no mareante gracias a ese puntito cítrico que la suaviza. 

No hay una nota que se desligue demasiado de las otras. Percibes notas de flores blancas, dulces, pero no huele especialmente a nardo, a jazmín, o a frangipani, aunque, esta última, es la que más claramente se distingue, sin deslucir al resto.

Es una fragancia curiosa, porque sale fresca, pero se siente cálida y relajante gracias a esas notas de sándalo que flotan discretamente por la habitación.

No es invasiva, ni excesivamente intensa. Se nota que está, pero no es un bofetón de olor.

Me gusta mucho, y repetiré con ella.

Orange Splash:
La marca define su olor como el refrescante aroma de naranjas frescas recién recolectadas, pero a mi me recuerda más al olor de los pica-pica de naranja que a otra cosa.

No es un olor natural, sino sintético, a chuchería, sin pasarse de dulzón. No es desagradable, pero no es tan evocador como me esperaba.

Está bien para crear un ambiente relajado y animado a un tiempo, con cierto toque infantil y despreocupado, pero no es una fragancia con la que me sienta especialmente identificada.

No tiene un olor invasivo ni fuerte, para estancias de tamaño medio está bastante bien.

No creo que repita con ella, el matiz de refresco artificial que queda de fondo no me termina de convencer.

Citrus Tango:
Mezcla de aromas frescos de limón, naranja y pomelo.

La verdad es que esperaba más de esta Yankee Candle. 

Tiene un olor cítrico muy agradable, fresco, con cierto matiz que no llega a ser dulce del todo, pero que alivia las notas ácidas de las frutas cítricas a las que representa.

La nota más destacada es una mezcla entre el olor a limón, y algo que quiere parecerse a una naranja dulce. Su salida es algo más ácida, con un olor que recuerda al pomelo.

El problema que tiene esta tartaleta es que su olor resulta muy suave; tanto, que si la prendes en la habitación en la que estás, a los 10 minutos te da la sensación de que no huele. Sin embargo, si sales, te darás cuenta de que sí desprende un olor muy agradable y relajante. La historia está en que lo percibes en el momento del cambio de sala, pero no cuando la tienes en tu misma estancia, aunque ésta sea pequeña.

Por eso, pese a que el olor me gusta mucho, es excesivamente suave para lo que busco. Una vela perfumada me da más olor que esta tartaleta encendida; por eso, tampoco repetiré con ella.

Oud Oasis:
Lujoso y seductor, este precioso incienso árabe ayuda a establecer un estado de ánimo relajado.

Esta tartaleta se vino conmigo en mis compras en MuakUpShop recientemente.

Tiene un olor cálido y envolvente, muy agradable. Es un incienso de olor almendrado, con notas amaderadas, y un leve toque de vainilla. Huele a incienso, sí, pero a un incienso algo dulce, y muy especial.

Crea un clima muy acogedor que invita a recogerse y a disfrutar de momentos en poca compañía, o incluso, en soledad. Cualquier opción que no te rompa un clima de calma.

El olor es bastante intenso, pero no llega a ser mareante. Lo encuentro de corte otoñal, y creo que es ideal para estancias medias o grandes.

Seguramente, repetiré con él más adelante.

Por hoy, lo vamos a dejar aquí.
¿Qué os parece esta nueva sección?¿Habéis caído ya en el universo Yankee Candle?¿Cuáles son vuestras fragancias favoritas, potingueras?